ORACIÓN A LA VIRGEN DE LA SALUD

¡Virgen María, Madre de la Salud! Tu Hijo divino te encargó que fueras también Madre de todos los hombres. Desde entonces, con admirable fidelidad, has estado presente en la vida de la Iglesia y de cada uno de sus hijos; como ejemplar de todas las virtudes personales y comunitarias; como medianera nuestra ante Dios, y como madre de la vida divina que Cristo nos comunica.
Tú conoces nuestros sufrimientos y problemas, nuestras infidelidades y caídas. A ejemplo tuyo y con tu ayuda, aceptamos el plan de nuestro Padre Celestial que, en Cristo y por el Espíritu Santo quiere salvarnos a través de las pruebas y sufrimientos de la vida temporal, hasta darnos la plenitud de su vida sin término. Amén.

jueves, 23 de junio de 2016

Iglesia saluda acuerdo de cese bilateral

Resultado de imagen para conferencia episcopal de colombiaLa Iglesia Católica en Colombia calificó como "histórico" la decisión de las delegaciones del Gobierno Nacional y de las FARC-EP, de firmar el acuerdo de cese el fuego y de hostilidades, bilateral y definitivo. 
A través de un comunicado de prensa, el secretario general del episcopado, monseñor José Daniel Falla Robles, afirmó que se espera que este acuerdo "sea el primer paso para construir la paz" y que brinde las garantías en el respeto a los derechos humanos.
Imagen referencial / Bandera de Colombia. Foto: Flickr Politécnico Grancolombiano Departamento de Comunicaciones (CC BY-NC 2.0).Así también, recordó al Gobierno que es necesario ofrecer a la opinión pública una información suficiente, clara y veraz sobre los acuerdos. 
Pidió que existan protocolos claros y públicos que informen sobre el procedimiento para la destrucción de las armas y que sea pública.
Finalmente recordó que la Iglesia continuará trabajando por la paz en el país y así como acompañó a las víctimas, durante el tiempo de guerra, también acompaña este momento histórico.

Tomado de: www.cec.org.co

sábado, 18 de junio de 2016

FELIZ DIA PAPÁ

Reciban todos un feliz día del Padre. Que San José sea un modelo que los acompañe y guíe en esa preciosa labor de ser padres. En ustedes está la responsabilidad de hacer de los hijos buenos cristianos de HOy y del mañana. A continuación les comparto una reflexión del Papa Francisco sobre los padres:

Cada familia necesita del padre. Hoy nos centramos en el valor de su papel, y quisiera partir de algunas expresiones que se encuentran en el libro de los Proverbios, palabras que un padre dirige al propio hijo, y dice así: «Hijo mío, si se hace sabio tu corazón, también mi corazón se alegrará. Me alegraré de todo corazón si tus labios hablan con acierto» (Pr 23, 15-16). No se podría expresar mejor el orgullo y la emoción de un padre que reconoce haber transmitido al hijo lo que importa de verdad en la vida, o sea, un corazón sabio. Este padre no dice: «Estoy orgulloso de ti porque eres precisamente igual a mí, porque repites las cosas que yo digo y hago». No, no le dice sencillamente algo. Le dice algo mucho más importante, que podríamos interpretar así: «Seré feliz cada vez que te vea actuar con sabiduría, y me emocionaré cada vez que te escuche hablar con rectitud. Esto es lo que quise dejarte, para que se convirtiera en algo tuyo: el hábito de sentir y obrar, hablar y juzgar con sabiduría y rectitud. Y para que pudieras ser así, te enseñé lo que no sabías, corregí errores que no veías. Te hice sentir un afecto profundo y al mismo tiempo discreto, que tal vez no has reconocido plenamente cuando eras joven e incierto.
Te di un testimonio de rigor y firmeza que tal vez no comprendías, cuando hubieses querido sólo complicidad y protección. Yo mismo, en primer lugar, tuve que ponerme a la prueba de la sabiduría del corazón, y vigilar sobre los excesos del sentimiento y del resentimiento, para cargar el peso de las inevitables incomprensiones y encontrar las palabras justas para hacerme entender. Ahora —sigue el padre—, cuando veo que tú tratas de ser así con tus hijos, y con todos, me emociono. Soy feliz de ser tu padre». Y esto lo que dice un padre sabio, un padre maduro. Un padre sabe bien lo que cuesta transmitir esta herencia: cuánta cercanía, cuánta dulzura y cuánta firmeza. Pero, cuánto consuelo y cuánta recompensa se recibe cuando los hijos rinden honor a esta herencia. Es una alegría que recompensa toda fatiga, que supera toda incomprensión y cura cada herida.
La primera necesidad, por lo tanto, es precisamente esta: que el padre esté presente en la familia. Que sea cercano a la esposa, para compartir todo, alegrías y dolores, cansancios y esperanzas. Y que sea cercano a los hijos en su crecimiento: cuando juegan y cuando tienen ocupaciones, cuando son despreocupados y cuando están angustiados, cuando se expresan y cuando son taciturnos, cuando se lanzan y cuando tienen miedo, cuando dan un paso equivocado y cuando vuelven a encontrar el camino; padre presente, siempre. Decir presente no es lo mismo que decir controlador. Porque los padres demasiado controladores anulan a los hijos, no los dejan crecer.
Todos conocen esa extraordinaria parábola llamada del “hijo pródigo”, o mejor del “padre misericordioso”, que está en el Evangelio de san Lucas en el capítulo 15 (cf. 15, 11-32). Cuánta dignidad y cuánta ternura en la espera de ese padre que está en la puerta de casa esperando que el hijo regrese. Los padres deben ser pacientes. Muchas veces no hay otra cosa que hacer más que esperar; rezar y esperar con paciencia, dulzura, magnanimidad y misericordia.
Un buen padre sabe esperar y sabe perdonar desde el fondo del corazón. Cierto, sabe también corregir con firmeza: no es un padre débil, complaciente, sentimental. El padre que sabe corregir sin humillar es el mismo que sabe proteger sin guardar nada para sí. Una vez escuché en una reunión de matrimonios a un papá que decía: «Algunas veces tengo que castigar un poco a mis hijos… pero nunca bruscamente para no humillarlos». ¡Qué hermoso! Tiene sentido de la dignidad. Debe castigar, lo hace del modo justo, y sigue adelante.
Así, pues, si hay alguien que puede explicar en profundidad la oración del “Padrenuestro”, enseñada por Jesús, es precisamente quien vive en primera persona la paternidad. Sin la gracia que viene del Padre que está en los cielos, los padres pierden valentía y abandonan el campo. Pero los hijos necesitan encontrar un padre que los espera cuando regresan de sus fracasos. Harán de todo por no admitirlo, para no hacerlo ver, pero lo necesitan; y el no encontrarlo abre en ellos heridas difíciles de cerrar.
La Iglesia, nuestra madre, está comprometida en apoyar con todas las fuerzas la presencia buena y generosa de los padres en las familias, porque ellos son para las nuevas generaciones custodios y mediadores insustituibles de la fe en la bondad, de la fe en la justicia y en la protección de Dios, como san José.

sábado, 4 de junio de 2016

INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA

Al día siguiente de la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, la Iglesia celebra la Fiesta del Inmaculado Corazón de María con la finalidad de manifestar que estos dos corazones son inseparables y que María siempre lleva a Jesús.
Esta celebración fue establecida por el Papa Pío XII en 1944 para que por medio de la intercesión de María se obtenga "la paz entre las naciones, libertad para la Iglesia, la conversión de los pecadores, amor a la pureza y la práctica de las virtudes".
Resultado de imagen para inmaculado corazon de mariaSan Juan Pablo II declaró que esta festividad en honor a la Madre de Dios es obligatoria y no opcional. Es decir, que debe realizarse en todo el mundo católico.
Durante las apariciones de la Virgen de Fátima a los tres pastorcitos en 1917, nuestra Señora le dijo a Lucía: “Jesús quiere servirse de ti para darme a conocer y amar. Quiere establecer en el mundo la devoción a mi Inmaculado Corazón”.
“A quien le abrazare prometo la salvación y serán queridas sus almas por Dios como flores puestas por mí para adornar su Trono".
En otra ocasión les dijo: "¡Sacrificaos por los pecadores y decid muchas veces, y especialmente cuando hagáis un sacrificio: Oh, Jesús, es por tu amor, por la conversión de los pecadores y en reparación de los pecados cometidos contra el Inmaculado Corazón de María!”
Muchos años después, cuando Lucía era postulante en el Convento de las Doroteas en Pontevedra (España), la Virgen se le aparece con el niño Jesús y, mostrándole su corazón rodeado de espinas, le dijo: “Mira, hija mía, mi Corazón cercado de espinas que los hombres ingratos me clavan sin cesar con blasfemias e ingratitudes”.
“Tú, al menos, procura consolarme y di que a todos los que, durante cinco meses, en el primer sábado, se confiesen, reciban la Sagrada Comunión, recen el Rosario y me hagan compañía durante 15 minutos meditando en los misterios del rosario con el fin de desagraviarme les prometo asistir en la hora de la muerte con las gracias necesarias para su salvación".
tomado de: www.aciprensa.com

viernes, 3 de junio de 2016

MES DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS


¿Conoces el Corazón de Jesús? ¿Cuándo conozco a una persona? ¿Cuando me la presentan y me dicen su nombre y apellido? ¿Cuando convivo con ella un par de días... ¿Cuando la conozco realmente tal cual es?
La Solemnidad del Sagrado Corazón de Jeús se celebra el viernes posterior al II Domingo de Pentecostés.¿Cuándo conozco a una persona? ¿Cuando me la presentan y me dicen su nombre y apellido? ¿Cuando convivo con ella un par de días... ¿Cuando la conozco realmente tal cual es? La gente sensata me responderá: cuando conoce usted sus sentimientos íntimos, o sea, su corazón...

¿Qué es corazón?

Es curioso. El corazón es un músculo: es una bomba impelente – expelente que sincrónicamente setenta veces por minuto manda un chorro de sangre por nuestras arterias a todos los rincones del cuerpo.
Anatómicamente no es más que eso. Pero todos sabemos que allí repercuten todas nuestras ambiciones y sentimientos. ¿Me enojo? Y allí está mi corazón palpitando aireado. ¿Algo me da miedo? ... y me llevo la mano al pecho como si temiese que mi corazón dejase de palpitar. ¿Quiero a alguien?... pues, aunque trate de disimular, mi corazón me traiciona: él hace brillar la mirada, colorear las mejillas, y entrecorta la respiración...
El mismo lenguaje nos recuerda a veces el corazón: «No tiene corazón». «No he visto corazón tan ruin...» o al contrario: «Es un gran corazón...»
También en el Evangelio encontramos parecidas referencias. Allí se dice que «María guardaba su recuerdo en su corazón». O que Jesús «se conmovió en su corazón...». Una y otra vez aparece en los libros santos esa misma palabra repetida para indicar un sentimiento, una emoción, una decisión.
Pero sobre todo sirve para indicar el amor. Desde la lejana antigüedad los hombres han grabado en los árboles corazones atravesados por flechas como símbolo de la vida y del amor.
El golpe más certero para matar es atravesar con la espada el corazón. El Evangelio hace hincapié en que le atravesaron su Corazón con una lanza. Allí quedó vibrando como para indicarnos cuál había sido el motor impulsor de su vida y de su redención: el amor que hacía palpitar su corazón.

Para entender el Evangelio

Nosotros no entenderemos el Evangelio mientras no lo leamos tratando de descubrir los sentimientos de Cristo. De lo contrario es una historia fría y sin vida. A través de su corazón comprendemos su verdadero sentido.
Y la entenderemos mucho más en la medida que comprendamos que su corazón palpitaba por nosotros. Y que ese corazón no ha muerto, y que hay un secreto inmensamente precioso en él.
Es el secreto del amor. El principal mandamiento de Cristo. El más difícil, pues casi nadie lo ejercita. El que es resorte y termómetro de los demás... y que Él quiere que cumplamos como ÉL lo cumplió: «Un nuevo mandamiento os doy –decía en la última cena- que os améis los unos a los otros como Yo os he amado...»

Un nuevo mandamiento

¿Dónde está la novedad de ese mandamiento? En el modo: « como Yo»... Hay que vivir de nuevo la vida de Cristo. Hay que mirar a los hombres como Él los miraba... hay que hacer palpitar nuestro corazón sincrónicamente con el suyo...
Por eso la Iglesia nos pide que tributemos culto a Jesús en su Corazón, para que desentrañemos sus misterios, para que nos emocionen sus emociones, y seamos capaces de amar sus amores...
Resultado de imagen para sagrado corazon de jesus¿Qué ama el Corazón de Jesús? –pues, a los hombres. Nos vino a redimir, vino a entregarnos su vida: a dejar clavar en una Cruz, a dejar que alguien le atravesase su Corazón con una lanza.

Pide una respuesta

Esto es lo que ha hecho Jesucristo por nosotros. La devoción y culto al Corazón de Jesús, pide una respuesta nuestra a ese amor infinito a ese amor inmenso. La repuesta pide una entrega confiada: la consagración. O un deseo de resarcir: la reparación...
¿Qué es el culto y devoción al Corazón de Jesús? –es conocer a Cristo en su Corazón, es imitarlo en su amor. Es entregarse a Él en la consagración, es dedicarse a curarle sus heridas en la reparación, pero sobre todo, es amar, amar, amar... como Él nos amó...
http://www.iglesia.org/component/k2/item/1963-mes-del-sagrado-coraz%C3%B3n-de-jes%C3%BAs